Las sedes corporativas son la máxima representación de la imagen y el trabajo de las grandes empresas. Por este motivo son muchas las compañías que apuestan por establecer sus oficinas en los edificios más representativos de la ciudad.
Las sedes corporativas más llamativas en Madrid
Ciudad del BBVA – Edificio Vela
“Una ciudad corporativa y sostenible”
El complejo está compuesto por siete edificios entre los cuales destaca La Vela, con una altura de 93 metros y divido en 19 pisos. La entidad no sólo quería un espacio donde agrupar a sus 6.000 empleados sino que buscaba realizar una ciudad que representase la transformación que BBVA ha llevado a cabo en los últimos años.
La ciudad es completamente sostenible y eficiente, así lo certifica la Certificación LEED® Oro de U.S. Green Building Council (USGBC). Este sello garantiza un ahorro de más del 40% en agua y una reducción del consumo energético del 30% logrando minimizar el impacto medioambiental.
Sede corporativa de Coca – Cola
“Unas oficinas diseñadas por y para los empleados”
Las oficinas de Cola – Cola Iberia en Madrid son un ejemplo de cómo los propios empleados han decidido trabajar. Sus 12.000 m² se han convertido en un espacio “cálido” para quienes trabajan en él, porque son quienes han planteado iniciativas propias tras el grupo de trabajo ‘work streams’. Espacios como el comedor o las salas de reuniones (externas e internas) facilitan el trabajo horizontal y colaborativo.
La distribución del espacio es completamente abierto sin barreras arquitectónicas, ni el equipo directivo dispone de despachos personales, facilitando la jerarquía horizontal. Es más, cualquier empleado puede decidir dónde y cuándo trabajar, ya sea en la terraza o en el bar destinado para relajarse y desconectar.
Sede corporativa de Havas Group
“To be better together”
El año pasado la agencia internacional de publicidad y comunicación Havas decidió unificar todas sus agencias y equipos de media, creatividad y digital, así como al conjunto de especialidades en Havas Village Madrid. El edificio, situado en pleno Barrio de Chamberí, dispone de más de 11.000 m² divididos en siete plantas.
La actividad de la empresa demanda espacios diáfanos y así facilitar la colaboración entre empleados, la inspiración y sobre todo la creatividad. Los ejecutivos no disponen de despachos, sus áreas de trabajo son acristaladas y sin puertas, símbolo de cercanía y proximidad.
Las sedes corporativas más llamativas en el mundo
Apple Park – Cupertino, California
“Diseño, innovación y tecnología”
Está claro que la nueva sede de Apple crea expectación y más si es conocida como el “platillo volante”. El diseño del internacional Norman Foster es un espacio circular de 2,8 millones de pies cuadrados, es decir unos 260.128 m², que acogerá a 12.000 empleados. Se calcula que el coste de este edificio ha superado los 5.000 millones de dólares.
La innovación y la tecnología han sido las protagonistas en la construcción de Apple Park. El edificio está recubierto con 6 kilómetros de vidrio curvo, es más, la tecnológica acabó comprando la empresa proveedora del mismo. Su sistema de ventilación es ya objeto de estudio dado que prescinde del aire acondicionado y de la calefacción gracias a la ingeniería empleada para su autoregulación.
Google – Londres
“Una sede que se adapta al estilo de movilidad de la ciudad”
La próxima sede de Google en Londres se encuentra en el norte, junto a la estación King Cross. Será un campus de 80.800 m² que dispondrá de todas las comodidades que los empleados necesitan para sentirse mejor que en casa: una pista de 200 m para actividades deportivas, una azotea ajardinada que dispone de las mejores vistas de la ciudad o 680 plazas para bicicletas.
Esta nueva sede comenzará a construirse el próximo 2018 y acogerá a 4.000 empleados en un edificio de 11 pisos de altura.
Facebook – Palo Alto, California
“Una filosofía materializada en un espacio donde trabajar”
En 2009 Facebook decidió unificar sus 10 pequeñas oficinas dispersas en Silicon Valley en una de 14.000 m² en Palo Alto, California. A la hora de realizar la implantación de las mismas realizaron encuestas a los empleados para saber cuáles eran sus preferencias y así diseñarlas bajo su criterio. Personalización, espacios abiertos, colores vivos y zonas donde desconectar y relajarse.
El edificio era un antiguo laboratorio de los años 60 y tras una gran reforma lograron realizar espacios que facilitasen la interacción y conexión entre trabajadores, filosofía no tan de moda entonces.