Entrevistamos a Mikel Echavarren, CEO de Colliers International Spain. La compañía ofrece servicios profesionales especializados en el ámbito inmobiliario, enfocado tanto a usuarios como a propietarios e inversores que operan a nivel local, nacional o internacional.
Echavarren, con 30 años de experiencia en el sector inmobiliario, nos cuenta los proyectos y retos de Colliers para este año y su visión sobre la situación actual del sector.
¿Qué distingue a Colliers de otras consultoras inmobiliarias?
Colliers es una organización mucho más flexible que nuestros competidores. Tiene una estrategia de crecimiento global basada, fundamentalmente, en la integración de los mejores especialistas independientes de cada país adaptándose a su forma de operar y estructurando dichas adquisiciones en forma de partnership.
Es un modelo muy atractivo para los asesores con estrategia de boutique que quieren acceder a las oportunidades que ofrece una gran plataforma global pero que entiende y respeta a cada socio local.
¿Cuál es el perfil de sus principales clientes?
Nuestros principales clientes son los fondos de inversión inmobiliarios, los hedge funds, bancos españoles, SAREB, inversores hoteleros y grandes corporaciones en su implantación en España.
¿Cuáles son las principales operaciones en las que han participado en el último año?
El asesoramiento financiero a Blacsktone en la compra de la cartera de deuda del Banco Popular (la mayor operación inmobiliaria de la historia en España), la venta de la sociedad Promociones Habitat, la venta del hotel Hilton Diagonal Mar, y las ventas del centro comercial ABC de Serrano y del 50% del proyecto Canalejas, ambos en Madrid. Sólo estas transacciones han incluido activos por más de 30 mil millones de euros.
A principios de año Colliers International Group adquirió Irea, ¿qué sinergias surgen de esta fusión?
Irea incorpora un posicionamiento único en el sector inmobiliario español, como el mayor experto financiero en el sector inmobiliario y hotelero y los mayores especialistas inmobiliarios de entre los asesores financieros.
Hay una sinergia total entre los servicios de asesoramiento en transacciones que aporta irea, centrados en la venta de sociedades inmobiliarias, hoteles, suelo y grandes inmuebles y los de Colliers, especializados en el asesoramiento a compradores de activos muy singulares. Asimismo, la experiencia de Colliers en servicios técnicos de alto nivel encaja perfectamente con el soporte necesario a transacciones hoteleras y de suelo como las que gestionaba irea.
La gran ventaja competitiva vendrá por la conjunción de los expertos en asesoramiento financiero e inmobiliario de ambos equipos. Es una combinación única en el mercado español de servicios profesionales.
¿Cuáles son sus proyectos principales en marcha para este año?
Transacciones de portfolios de deuda, transacciones corporativas de sociedades inmobiliarias, la gestión del fondo de financiación alternativa de Marathon para la compra de suelo residencial y el cierre de varias transacciones singulares de activos inmobiliarios y de hoteles.
¿Qué objetivos se han marcado para este año?
La integración física de ambos equipos, que estará completada hacia mediados de octubre, el reforzamiento de nuestra actividad de valoración, el lanzamiento de los servicios de asset management y la aplicación al sector promotor residencial de nuestras experiencias en la venta de promociones de gran lujo como vía de diferenciación e incrementos de precios de promociones no tan singulares. Tenemos, asimismo, un claro mandato de compra de sociedades e integración de equipos expertos en el mercado logístico, en comercial y en agencia.
¿Cuál es el reto más importante de su empresa a día de hoy?
Nuestro reto es conseguir ser la empresa más atractiva del sector para trabajar y también el número uno en rentabilidad. Es la misma filosofía que hemos mantenido en irea en los últimos 16 años: que se nos reconozca como el equipo más brillante del mercado español y el mayor especialista para transacciones complejas, de sociedades, de hoteles y de activos singulares.
¿En qué punto cree que se encuentra el sector inmobiliario?
El sector inmobiliario se encuentra, en cuanto a activos comerciales, en una fase de gestión de lo adquirido y de sustitución de los fondos oportunistas por los fondos core, de forma directa o a través de las desinversiones que realizarán las socimis para rotar sus carteras. El mercado de promoción residencial está lanzado con una perspectiva de tres años de gran actividad y oportunidades, con nuevos mercados en recuperación y una carrera frenética para salir a bolsa y por el crecimiento.
¿Qué segmento del sector, según sus datos, cree que será el protagonista en 2018?
Durante el segundo semestre se van a cerrar importantes portfolios de oficinas y Centros Comerciales. Hay ciertos inversores que entienden que su recorrido en la gestión ha terminado y es hora de dar paso a inversores más core.
¿Cuál cree que es el cambio más importante que se ha producido en el sector en los últimos años?
La importancia del equity y la consciencia del coste el capital. Las inversiones han sido siempre financieras, pero es ahora cuando se analizan de esta forma. Los recursos propios son limitados y caros y el paso del tiempo es un factor extraordinariamente relevante para evaluar precios y costes de oportunidad. El mundo financiero se ha cruzado con el inmobiliario y lo ha hecho para quedarse.
¿Estamos en la era del proptech?
Las herramientas tecnológicas son cada vez más importantes como apoyo a la comercialización y al análisis de oportunidades. No sustituyen al conocimiento, sino que lo complementan. Hay mucho interés y mucho ruido en torno a ellas, pero no sustituyen al conocimiento ni a la experiencia. Los segmentos del mercado que han vivido del uso de información privilegiada o de la rapidez en presentar oportunidades tienen, en mi opinión, los días contados. La transparencia del mercado crecerá de forma exponencial con las herramientas de análisis de big data. Apuesto más por el Fintech, las posibilidades alternativas de financiación que vendrán en el futuro en competencia con la banca comercial.