Barcelona tendrá su propio hub europeo de diseño desde el próximo mes de septiembre. El distrito 22@ acogerá la apertura del campus de la red canadiense LCI, que situará su escuela LCI Barcelona de Diseño y Artes Visuales como uno de los grandes proyectos en toda Europa. La inversión para la construcción ha sido de 35 millones, situándose a solo 400 metros del Disseny Hub. Las instalaciones ocupan un tamaño de 11.000 metros cuadrados con una notable mejora de las instalaciones y toda la construcción es sostenible.
Las instalaciones contarán con el certificado BREEAM que acredita la sostenibilidad de la edificación. De hecho, el campus tiene características como el aprovechamiento máximo de la luz natural al tener una fachada brise-soleil vertical. También destaca que se recogerá el agua de lluvia para el mantenimiento de las zonas verdes y se reutilizarán las aguas grises recogidas del propio edificio. Además, el campus está rodeado de un parque de unos 2.000 metros cuadrados que se ha cedido a la ciudad, urbanizándolo mediante un modelo de participación vecinal por el que los ciudadanos han podido trasladar ideas y necesidades del barrio.
El impacto que prevén procedente solo de estudiantes internacionales (habría que sumar los nacionales), es de más de 41 millones de euros en los primeros cinco años. Esto supondrá una activación inmediata de la actividad económica, principalmente en las zonas cercanas al distrito 22@ y a la Torre Glòries. Sobre todo en lo que tiene que ver con la vivienda, pues gran parte de estos estudiantes internacionales requerirán de un lugar en el que vivir durante el curso. Paulatinamente, pero muestra del potencial atractivo, los alumnos de este campus se triplicarán hasta alcanzar los 3.000.
El distrito 22@, que cuenta ya con más de 12.000 empresas, se situará como un hub del diseño y las artes visuales, mejorando todavía más su aportación de 10.000 millones de euros anuales al PIB de la ciudad (14,5% del total). “Es todo un impulso para Barcelona, que va a ser referencia no solo en Europa sino también en el mundo dentro del diseño, las artes visuales y la creatividad”, adelantan desde el centro.
Los análisis realizados por la escuela calculan que el gasto por coste de vida sea de unos 15.000 euros anuales por estudiante. Según los cálculos de la escuela, el primer año el impacto será superior a los 6 millones de euros y seguirá creciendo hasta los 10 millones en el curso 2028/2029. Cifras a las que habría que sumar el impacto de los estudiantes de otras zonas de Cataluña y España.
Dentro de la relevancia económica que tiene el nuevo campus está que hay un gran porcentaje de extranjeros que se forman en el centro, lo que va acompañado de un mayor gasto. La oferta de la escuela engloba Grados Oficiales, Postgrados y Másteres, y desde el año pasado Ciclos Formativos de Grado Superior entre otros programas. Una formación muy especializada que permite atraer a estudiantes de todo el mundo. “LCI Barcelona va a ser el centro de operaciones de la red en toda Europa y una de las sedes más importantes a nivel internacional”, explica Silvia Viudas, directora del centro. Sin ir más lejos, Alessandro Manetti, nuevo Head of Europe de LCI, está instalado en Barcelona.