International Workplace Group (IWG) pone el foco en España. La operadora de coworking de origen suizo está poniendo en marcha un plan con el objetivo de ampliar su capilaridad y alcanzar entre 400 y 500 espacios de trabajo flexibles en el mercado español durante los próximos cuatro o cinco años, ha informado Mark Dixon, consejero delegado y fundador de IWG a Expansión.
El grupo cuenta con este objetivo a medio plazo, tras haber abierto once ubicaciones durante 2024 y haber alcanzado setenta centros en España, después de registrar un crecimiento del 15% en este mercado. El pasado año IWG reforzó su presencia en Madrid, Sevilla y Málaga, además de estrenarse en ubicaciones como Coruña y Cádiz.
La compañía apunta a crecimientos en el entorno del 25% o 30%, por lo que se acercará a un centenar de coworking. Durante 2025, la firma inaugurará un espacio en el antiguo centro comercial Moda Shopping reconvertido, situado frente al estadio Santiago Bernabéu.
IWG tiene como parte de su estrategia la llegada a nuevas ciudades tras haberse consolidado en Madrid y Barcelona, con una veintena de centros en cada una de las dos capitales. El primer directivo del grupo indica que “abriremos por primera vez en Baleares y Canarias, así como en nuevas capitales de provinicia”. Y ha añadido que España es un buen mercado, que cuenta con numerosas empresas que apoyan a sus trabajadores, algo que permite a IWG apostar por la totalidad del mercado nacional.
IWG cuenta con una decena de marcas que ofrecen diferentes servicios. Actualmente, el grupo opera espacios en España bajo las marcas Regus, caracterizados por su tamaño pequeño y con foco en la productividad; Signature, compuesta por oficinas premium en zonas céntricas; Spaces, con espacios de entre 20.000 y 100.000 metros cuadrados, y HQ, para una amplia variedad de empresas. El consejero delegado avanza que “a medida que vayamos creciendo en España, tenemos planes de abrir espacios bajo el resto de marcas”.
IWG opera en todo el mundo 4.000 ubicaciones, repartidas en 120 países. El grupo ha facturado en el último ejercicio 3.690 millones de dólares (unos 3.428 millones de euros) a nivel global, lo que supone un 0,3% que en 2023. La compañía cotiza en la Bolsa de Londres.
