Ibervalles sigue empujando su cifra de negocio mientras planea nuevas inversiones en el segmento oficinas. La socimi de la familia Isidro Rincón prevé invertir 60 millones de euros durante este ejercicio, con principal foco en oportunidades value-add en los mercados de Madrid y Lisboa, según apunta la compañía en los resultados anuales consolidados remitidos a BME Growth.
Para llevar a cabo sus planes de crecimiento, la socimi cerró durante 2022 diversas ampliaciones de capital, con prima de emisión, por un importe total de 65,3 millones de euros. Según apunta Ibervalles en las cuentas, las inversiones inmobiliarias proyectadas pueden ejecutarse tanto por compras directas de activos o indirectas, mediante la adquisición de las sociedades que controlan los inmuebles.
Ibervalles cerró el ejercicio 2022 con una facturación de 7,5 millones de euros, un 28,7% más que en el ejercicio anterior. Este incremento en la cifra de negocios no se repercutió en el resultado neto del ejercicio, que cayó un 3,6%, hasta 10,7 millones de euros, principalmente por la menor variación de valor de los activos.
Como consecuencia de la menor revalorización de la cartera respecto el año anterior (en 2021 la plusvalía en la valoración de los activos reportó 19,7 millones frente a los 6,5 millones de euros en 2022), el resultado de explotación de la compañía se ha desplomado un 59,15% en comparativa interanual, pasando 21,3 millones de euros en 2021 a 8,7 millones de euros en el pasado ejercicio.
La compañía ha amortiguado el impacto en los resultados de esta diferencia en la valoración de los activos de un año a otro por la inexistencia de resultados en la venta de participaciones de compañías participadas, que en 2021 arrojaron pérdidas por 13,2 millones.
La valoración de la cartera de Ibervalles a 31 de diciembre de 2022 se elevaba hasta 261 millones de euros. El portfolio de la socimi comprende quince activos del segmento residencial, oficinas, un hotel y dos terrenos pendientes de promoción en diferentes puntos de España y Portugal. En el país vecino, Ibervalles mantiene desde 2006 la propiedad del inmueble de oficinas AH50, ubicado en Lisboa, que le reportó una renta de un millón de euros en 2022.
Durante el pasado ejercicio, la socimi incorporó a su cartera cuatro nuevos activos, todos ubicados en Madrid, en los que destinó 99,4 millones de euros. Ibervalles compró en mayo por 13,2 millones de euros el edificio localizado en el número 24 de la calle Josefa Valcarcel. En el mismo mes, la compañía completó la adquisición de un inmueble de oficinas ubicado en el número 506 de la calle Alcalá por 18,5 millones de euros.
La socimi también se hizo en diciembre con el inmueble de oficinas ubicado en los números 16-18 de la calle Ulises, por el que destinó 40 millones de euros. Por último, Ibervalles adquirió su primer activo hotelero en enero después de una inversión de 27,7 millones de euros. En paralelo a la compra de nuevos activos, la compañía amplió su participación en las socimis Inversa Prime y Arima por un importe total de 2,6 millones de euros.