Altamira, Anticipa/Aliseda, Solvia, Hipoges y Servihabitat pujan por el ‘ladrillo’ de CaixaBank

La batalla por llevarse la gran cartera del año en el sector de los servicers ha comenzado. El pasado viernes CaixaBank recibió las ofertas de los principales gestores para adjudicarse la megacartera de 4.000 millones de euros de activos vinculados al ladrillo de la entidad, tal y como lo confirman distintas fuentes del sector a elEconomista.es.

Ninguno de los grandes servicer ha querido faltar al proceso que se está gestionando desde Deloitte. Así, Altamira (doValue), Anticipa/Aliseda (Blackstone), Solvia (Intrum), Hipoges (KKR) y Servihabitat (Lone Star) presentaron sus pujas la semana pasada, según apuntan las mismas fuentes, que confirman que el siguiente paso en el que se conocerá a los finalistas está previsto para finales del mes de marzo.

La cartera que está en juego se compone de los activos que se encuentran bajo el perímetro de BuildingCenter, la sociedad inmobiliaria que se encarga de dar salida a los activos inmobiliarios procedentes de CaixaBank. Actualmente el contrato está en manos de Servihabitat, que tiene el mandato hasta finales de este año.

El servicer de Lone Star, que está participado al 20% por la entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri, no lo va a tener fácil para ser de nuevo el adjudicatario de esta cartera, ya que según explican los expertos del sector, el objetivo de la entidad con el nuevo contrato es lograr ahorros del entorno del 20% con la rebaja de las comisiones, replicando el modelo que logró Sareb al cambiar sus plataformas de gestión el pasado ejercicio.

La cartera que está en juego estaría generando actualmente unos ingresos anuales a Servihabitat de entre 70 y 80 millones de euros, según explican a este medio fuentes financieras.

Estructura de la operación

BuildingCenter dispone de una cartera de activos compuesta por un mix de residencial, industrial, suelo y alquiler con un valor neto contable de entre 3.000 y 4.000 millones de euros.

La operación se ha estructurado dividiendo los activos en tres paquetes: alquiler, comercial y gestión técnica. Las dos últimas se adjudicarían bajo un contrato de tres años, mientras que la pata de alquiler sería de dos años. En los tres casos existe la posibilidad de renovar tender por un ejercicio más el contrato atendiendo a distintas variables.

La adjudicación de esta cartera será decisiva para la reconfiguración forzosa que está experimentando el sector de los servicers en España tras el proceso de consolidación que ha vivido la banca en los últimos años. Así, los expertos consideran que en el caso de que Servihabitat se quedara fuera del contrato lo más probable es que se dieran en el sector nuevas operaciones corporativas.

El movimiento de Sareb el pasado año fue ya decisivo en el escenario de los servicers, ya que la sociedad rompió con las gestoras que durante años se habían ocupado de dar salida a los activos tóxicos heredados de las cajas de ahorros: Altamira, Haya, Servihabitat y Solvia. En este caso resultaron ganadoras Anticipa-Aliseda e Hipoges.

Venta de Haya Real Estate

Otro de los grandes movimientos que se están negociando en el sector actualmente es la operación de venta de Haya Real Estate. Cerberus, propietario del servicer y bajo el asesoramiento de Deutsche Bank, reactivó el proceso a finales del pasado año con una aspiración de ingresos de entre 500 y 600 millones de euros.

Unas cifras que en el mercado consideran demasiado abultadas teniendo en cuenta la estructura de la compañía (con la participación de los bonistas) y su elevado endeudamiento. Así, tras la refinanciación que cerraron el pasado ejercicio que extendió el vencimiento de la deuda de 2022 a 2025, el pasivo supera los 360 millones de euros.